Incrustación RFID de alta temperatura
La incrustación RFID de alta temperatura sobresale en entornos industriales extremos y ofrece una resistencia al calor excepcional, flexibilidad y diseño compacto. Es ideal para aplicaciones que requieren un rendimiento confiable en condiciones de alta temperatura donde fallan las etiquetas RFID tradicionales.
Capaz de soportar temperaturas de hasta 100 °C, esta incrustación resistente garantiza un seguimiento y una gestión fiables de los artículos en entornos exigentes.
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